viernes, 8 de noviembre de 2013

Soneto XLVIII (Refugio)




Crecí entre verdes mares de espigas generosas,
junto a resecos campos de olivos y viñedos,
entre unos brazos fuertes, refugio de mis miedos
en madrugadas negras de estrellas temblorosas.

La juventud me trajo más lágrimas que rosas
pues del amor yo hice la biblia de mis credos,
mas se me fue la tarde como agua entre los dedos
y vino a mí la noche de zarpas tenebrosas.

Por terminar con tanto vagar sin rumbo fijo
me refugié en tus brazos de fiel samaritana
y allí encontré reposo, calor y buen cobijo.

Y aunque volvió la vida con fuerza una mañana,
ya no encontré las llaves que abrieran mi escondrijo
y me quedé a mirarla pasar tras la ventana.



                                                                                     


20 comentarios:

  1. el tiempo es inexorable verdugo de nuestros días
    y ante ello solo asumir que todo se oxida

    bello soneto Jerónimo
    la vida es lo que es
    abrazos y buen fin de semana

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  2. Precioso alejandrino.
    Un abrazo.

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  3. A veces nos dejamos llevar por la mirada tras la ventana refugiándonos en los minutos de nuestros pensamientos, a veces... la vida corre tras él.

    Preciosa poesía.

    Un beso.

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    Respuestas
    1. perdón, me confundí... quise decir: ... la vida corre tras ellos...

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  4. Así quedamos contemplando que la vida pasa…sin brazos fuertes y sin escondrijos…solos frente a un incierto futuro.
    Muy bellos soneto.

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  5. Hola Jerónimo..Y ahora, cuando el protagonista de tu relato ve pasar la mañana, vive? Yo creo que sí, pero de otra manera.

    Quería decirte que me he mudado; mi blog de Arquetipos y Quimeras está descansando, no sé por cuanto tiempo; aunque pueda aparecer el mensaje de que el blog es solo para invitados, no tiene lectores ni invitaciones que hacer.

    te espero en mi antiguo, mi primer blog: lavida.esuninmensooceanointerior; serás bienvenido. Desde allí te seguiré.

    Besos,

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  6. Es una preciosidad.
    Qué bien escribe mi paisano¡
    El próximo finde, tenemos el Medieval.
    Bss

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  7. Precioso este soneto que hoy nos regalas.
    El tiempo, amigo Jerónimo, no nos da tregua.

    Un abrazo y feliz finde

    Fina

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  8. Si estaba feliz en esos brazos, a qué el intento de volver a volar, acaso para sufrir?

    Buen soneto y hermoso

    Abrazos

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  9. Así es la vida...

    Un poema muy hermoso. Me ha gustado mucho.

    Un fuerte abrazo.

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  10. Este soneto es de los versos más largos, catorce sílabas (es que como no sé como se llaman). Bueno ya veo que nada te impide darle a tus inspiraciones cualquier forma, que siempre el contenido es fluido y se lee muy cómodo y no pierde el sentimiento del poeta, el cual es un poco masoca, pues estando bien en brazos de la fiel samaritana, todavía está con el ojo avizor, jajaja.
    Siempre un placer Jero. Un abrazo.

    Ah, ahora que me acuerdo, ¿se llaman alejandrinos?... Bueno lo miro en Internet, jajaja

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  11. Hola Jeronimo, da mucho que pensar tu poema de hoy. Lo sentí como si fuera toda una vida que allí transcurriera. Magnifico, como siempre!
    Un abrazo

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  12. Qué delicia leer tus alejandrinos, Jerónimo, un placer, un soneto precioso. Me encanta y lo releo para degustarlo... Gracias por tan bellas letras.

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  13. magnifico arte el del soento, aunque me cuesta la vida esas técnicas y me siento mejr en la libertad del verso libre, admiro a quien lo sabe manejar y además transmitir. Enhorabuena!!!

    Un abrazo

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  14. Jerónimo, toda una vida que pasa ante los ojos del poeta, una vida que parece que se le escapa...muy bonito

    Un besito

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  15. Es que hay una parte de nuestra vida con tal pasión que aunque de nuevo queramos retomar el punto donde lo dejamos y aunque tengamos esa oportunidad de hacerlo, ya nunca más será lo mismo.
    Muchas gracias Jero por haberlo explicado de una manera tan bonita. Abrazos.

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  16. Gracias a todos vosotros por vuestra lectura y por vuestros amables comentarios.

    Os mando un abrazo.

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  17. La vida tiene sus propios métodos para hacernos llegar a nuestro destino y no siempre son placenteros, como todos sabemos. Sin embargo, hay que pararse en el camino o mirar tras la ventana para ver mejor a dónde hemos llegado y dar gracias!
    Más besos.

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  18. Extasiada me quedo ante tu dominio del soneto, del alejandrino y de la expresión de sentimientos y trances que la vida nos depara.

    Besos

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