jueves, 16 de enero de 2020

Enero en la ventana






Ahí afuera,
 el vibrante silencio rompe todo equilibrio.
La luna se ha plantado –redonda, anaranjada-
sobre la vieja ermita que vela en La Montaña
por todas nuestras almas.
Venus tiembla en lo alto con brillos indecisos.

Palidecen de frío y abandono
las pálidas camelias del parterre .
Y el césped del jardín, se arropa poco a poco
con la sábana blanca de la helada.

Enero se presenta sin tapujos,
sin máscaras amables,
y me deja su aliento congelado
por todos los rincones de la casa.

La luna se ha escondido tras unas nubes negras
que sueñan con ser lluvia en la alborada.
La noche fluye gélida y hermosa.

Tiritando de frío y de nostalgia
de otras noches como esta junto al fuego
de tu cuerpo de ninfa apasionada,
me voy de la ventana.

Junto a los troncos muertos que crepitan
en la cálida y roja chimenea,
se adormece mi alma.
                                                                               Enero-2019