sábado, 30 de noviembre de 2013

Razones para el verso (Estancia)



"Ningún hombre pondría una sola palabra en papel si tuviera el valor de vivir lo que cree" - Henry Miller



Escribir, ¿es acaso cobardía?
¿Es dormir la conciencia?
Escribir es volver a la inocencia
que perdimos un día.
Yo nunca escribiría
solamente por ocultar mis miedos,
¡sería cosa macabra!
Procuro que se abra
mi mente a la belleza de este mundo,
a ese sentir profundo
que sólo sé expresar con la palabra.

No se escribe tan solo por despecho.
Lo hacemos, sobre todo,
para dejar constancia de algún modo
de lo vivido y hecho.
Nos asiste el derecho
de contar nuestras penas y alegrías
a quien oírlas quiera.
No es ninguna quimera
el querer transcender desde esta vida,
el buscar la salida
al túnel de la muerte, tan certera.

Y así, canto a la luz que hay en tus ojos,
al brillo de tu pelo,
a la hoguera que prende en ese cielo
de atardeceres rojos.
Nunca pondré cerrojos
a mis versos, pues son libres cometas
cargados de ilusiones.
Siempre habrá mil razones
para pintar con ellos la belleza
y limar la rudeza
que habita en los sombríos corazones.