Hoy regresé a tu
sombra,
hoy llegué a
descansar bajo la fronda
de tu poblada barba
de anciano venerable.
Curtido en mil
batallas al relente,
sabio en mil
primaveras,
te dejaste la piel
de tu corteza,
cien mil veces
herida,
en perseguir la luz
de la mañana,
en absorber la savia
redentora
desde ocultos
remansos en lo hondo.
Con cada nueva
aurora,
le lavabas la cara a
cada hoja
con agua cristalina
del rocío
y acogías después
entre tus ramas
a legiones de seres
indefensos
o ahuyentabas a
extraños y enemigos
con ráfagas heladas
que el frío viento del
norte te prestaba.
¡Viejo chopo del
río,
amigo de mi infancia
y juventud!
Hoy vuelvo a tu
quietud de árbol sereno
cansado ya de mundo
y casi anciano
lo mismo que eres tú.
Hoy vengo a
devolverte las caricias
que recibí a la
sombra de tus hojas.
Hoy vuelvo a
rodearte con mis brazos
el tronco ya
arrugado y carcomido
por años soportando
fríos inviernos
en triste soledad.
Tú eres, chopo del
río,
el amigo más fiel
que nunca tuve,
el amor más auténtico,
mi más cálido hogar.
Por eso,
cuando sienta mis
últimos latidos,
cuando llegue mi
hora,
quisiera descansar
bajo tu copa,
cerca de tus raíces
y fundirme contigo en
un último abrazo
que eleve nuestras
almas al paraíso
donde árboles y
hombres que se amaron
vivan ya siempre
unidos
por toda una
infinita eternidad.
Creo que tengo el honor de ser el primero que te comenta el poema, es verdad que tú sientes como nuestros profundos trovadores, es verdad que tu alma busca sin descanso lo más importante que se puede ser en la vida; un hombre bueno, tú lo eres además de un excelente poeta, los delirios de universalidad que en otros me suenan huecos y recurrentes en ti me suenan hondos y sinceros como la herida que clama en el pecho de Machado.
ResponderEliminarUn abrazo, escribe todo lo que se te ocurra, no dudes que merece la pena.
Gracias Enrique por todos esos elogios hacia mi poesía y mi persona.Soy de los que piensan que de nada sirve escribir si no se hace con el corazón y con la verdad siempre por delante,nuestra verdad,aunque a veces nos duela.Cuando se hace así,el resultado siempre merece la pena,al menos para el que escribe.
EliminarUn abrazo,amigo.
hermoso y sentido poema homenaje a este baluarte verde
ResponderEliminarfelicidades
buen fin de semana Joaquín
Gracias por pasarte Elisa. Los árboles y la Naturaleza en general se merecen todos los homenajes del mundo.
EliminarAbrazos
Ya veo que las reminiscencias de Machado han sido percibidas también por Francisco. Y es natural. El chopo, los olmos, el río, esa forma tan personal de expresar las cosas naturales en poesía se aprecia en ambos.
ResponderEliminarMe sumo también a su petición, y por la misma razón.
Abrazo, Joaquín.
Machado está presente en mis escritos desde siempre,cierto.Él y Juan Ramón fueron durante mucho tiempo mis poetas.
EliminarGracias por pasarte Ernesto.
No sé que decirte Jero, porque bien sabes lo que me gusta tu poesía y que eres uno de mis poetas ¡vivos! favorito, jajaja, aunque siempre me repita.
ResponderEliminarMe parece un poema muy hermoso, resaltando las virtudes del árbol, y los recuerdos con ese halo de nostalgia que casi siempre dejas en tus versos.
Te iba a decir que me encanta la tercera estrofa, pero en realidad me encanta todo. Me gustaría decirte cosas más profunda como nuestro amigo Enrique, pero no sé, jajaja. ¡Qué tiempos en el Mono! ¿verdad?, los echo de menos... allí aprendí de vosotros muchas cosas de las que no tenía ni idea.
Un abrazo con cariño Jero.
Hola Elda,como ves al final siempre contesto aunque haya pasado el tiempo y es que de todo se cansa uno.Hace tiempo que no sé de ti a ver si me paso por tu blog. En cuanto a Mono,sigo entrando de vez en cuando,siempre vuelvo porque en el fondo es cierto,fueron unos años muy entrañables donde hicimos buenos amigos.Ahora ha cambiado bastante,pero ahí sigue,en pie.Espero verte por allí de nuevo alguna vez.
EliminarUn fuerte abrazo
Joaquín, tu voz me suena a chopo, a ciprés, a roble a castaño...y a naturaleza.Esa entrega incondicional en las letras, que se expande en sombra y en fruto nos llega a todos y nos renueva, nos prepara para valorar la primavera, que una vez más hará florecer el silencio, la constancia y la espera sacrificada del invierno...
ResponderEliminarMi felicitación por tu unidad amorosa con la naturaleza, amigo.
Mi abrazo y mi cariño.
Gracias por tan precioso comentario María Jesús. La Naturaleza debería ser siempre objeto de nuestro cariño y nuestro respeto,se merece de vez en cuando unos versos.
EliminarAbrazos amiga
Qué bonito y sensible poema a un árbol...ellos guardan nuestros secretos, nos cobijan en momentos de soledad, también en la alegría y en los juegos de juventud, precioso Joaquín!!
ResponderEliminarGracias Maru por tu lectura y tus palabras.
EliminarLos árboles siempre son motivo de inspìración.
Un abrazo
Es hermoso ese querer eternizarse en un abrazo con el mejor y más natural amigo...
ResponderEliminarDe veras que es precioso y sentido.
Un gran abrazo.
Gracias Marinel,qué menos que querer fundirse con la naturaleza que nos cobija y alimenta.
EliminarUn abrazo
Un sentido y hermoso poema. Precioso.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias Amalia.Abrazos
EliminarBellísimo y nostálgico poema, Joaquín. Un gusto volver a leerte. Felicidades y besos de buenas noches, amigo poeta. María
ResponderEliminarEl gusto es mío María,gracias.
EliminarAbrazos
Hoy tu poema brilla de ternura y sinceridad... Déjame unirme contigo a su abrazo.
ResponderEliminarQuedas invitada siempre que lo desees Socorro.Gracias por pasarte.
EliminarUn abrazo
Un homenaje a ese árbol que tanto significa.
ResponderEliminarDesde luego pocas personas tienen un árbol y el tuyo, aunque viejo, bien merece este gran poema.
Un abrazo.
Así es Verónica,no es corriente tener un árbol aunque todos deberíamos adoptar uno para cuidarlo y protegerlo,es importante.
EliminarGracias por tu visita.
Se dice que, abrazar un árbol te traspasa su energía y yo me uno es abrazo tuyo al anciano Chopo. Hermoso poema Joaquín. Que por muchos años te esperen las raíces de tu querido árbol.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias Conchi,que así sea.
EliminarAbrazos.
Hermoso poema en honor a un árbol, bello sentimiento en estos versos.
ResponderEliminarFeliz finde Joaquín.
Un gran abrazo.
Gracias por tu visita Carmen.Un abrazo
EliminarTremendo e inmeeeenso este viejo chopo, mi querido JOAQUÍN, estamos en sintonía porque ayer mismo paseando cerca de mi río aquí, me quedé embobada viendo los inmensos árboles que crecen a la orilla, aquí carballos( robles) abedules, nogales, todos llenos de hiedra verde y líquenes que cubren sus troncos, por la humedad... me gustan los árboles, me parecen seres majestuosos que perduran en el tiempo acompañándonos silenciosamente, pero sí como tú dices tan bonito en tus letras fieles, leales... su energía está ahí para nosotros, su robustez nos da fuerzas... ¿ has intentado abrazar a este viejo e inmenso chopo? hazlo, su energía te inunda aun sin darte cuenta... a veces cuando voy por e bloque que abrazo a los árboles jajaja no creas que soy una lunática, bueno, un poquito puedes ser, es que una vez me lo comento una amigo que abrazándolos recibíamos su energía .. y ¿ qué podemos perder? nada jaja así que yo me abrazo a los árboles jaja bueno y a todo lo que se deja abrazar ; )
ResponderEliminarPrecioso JOAQUÍN, montón de besos y muuuy feliz domingo !!!
Alguna vez me he abrazado a un árbol,sí y creo que deberíamos hacerlo a menudo,yo también soy de los que creo que nos transmiten muchas cosas...Ya solo el observarlos como haces tú nos invita a pensar sobre su existencia y sobre lo importantes que son para nuestras vidas.
EliminarGracias querida María por dejar una vez más en mi sitio toda tu energía y tu buen humor,eres un encanto.Como ves he tardado un mundo en contestar pero al final siempre lo hago,soy uin vago redomado,lo reconozco...:)
Un fuerte abrazo.
Qué belleza de poema, Joaquín. El chopo es uno de mis árboles favoritos, porque vivo rodeada de choperas y me hiciste recordar mi adolescencia, mi padre plantando la chopera, el molino, el agua, los gorriones, las hojas del otoño... tantas cosas relacionadas con nuestro árbol castellano. Gracias amigo, por tu poesía, por tu sentir, por saber mantenerte fiel al Poema. Mi abrazo fuerte y mi cariño.
ResponderEliminarMe alegro mucho haberte traído a la memoria tiempos felices Julie.La poesía tiene también ese poder,el de trasladarnos al pasado y hacernos felices recordando.
EliminarGracias amiga por tus bellas palabras.
Un abrazo
Hoy me has llegado muy hondo al recordar, en tu sentido poema, a ese chopo amigo.
ResponderEliminarYo también tengo un chopo que es testigo de lo que he vivido, ha sido mi confidente y también un gran amigo.
Tiene más de medio siglo, pero aún sigue altivo, aguanta inviernos duros y me estimula a imitarle, porque la vida, aunque dura a veces, también tiene su atractivo.
Hoy me he acordado de ti y he venido a visitarte, aunque me has emocionado, he tenido suerte, me ha encantado el poema.
Cariños y buena semana.
kasioles
Gracias Kasioles. Un árbol siempre será un amigo fiel que te dará todo lo que le pidas a cambio de casi nada.
EliminarUn fuerte abrazo,amiga.
Maestro, me he quedado con esta figura, metáfora que asumo icónica de estos versos para demostrar el afecto por el viejo chopo: anciano de venerable barba. Un abrazo. Carlos
ResponderEliminarGracias Carlos por tu generosidad al comentar mis versos.Los árboles son seres venerables,sin duda.
EliminarUn abrazo