La noche,tan serena,
me trae,desde tu cuerpo,
lejano ya,imposible,
la esencia embriagadora
de aquel perfume tuyo
y mío...
Y,si cierro mis ojos,
puedo ver el deseo
de niña enamorada
que brota de los tuyos.
La noche,tan ardiente,
me rodea con tus brazos
de ninfa apasionada.
Me abraza y me emborracha
de lujuria y ternura,
de efusivos anhelos...
La noche,tan vacía,
me ha dejado indefenso,
me ha dejado tan solo
como el lucero aquel
que me mira en lo alto...
La noche,tan amarga...
me trae,desde tu cuerpo,
lejano ya,imposible,
la esencia embriagadora
de aquel perfume tuyo
y mío...
Y,si cierro mis ojos,
puedo ver el deseo
de niña enamorada
que brota de los tuyos.
La noche,tan ardiente,
me rodea con tus brazos
de ninfa apasionada.
Me abraza y me emborracha
de lujuria y ternura,
de efusivos anhelos...
La noche,tan vacía,
me ha dejado indefenso,
me ha dejado tan solo
como el lucero aquel
que me mira en lo alto...
La noche,tan amarga...
agosto-2010
La noche apasionada y dulzona pero tambien con sus duendes, sus demonios y sus fantasmas...
ResponderEliminarHola Jeronimo, maravilloso tu poema. Un abrazo.
Así es Carolina,la noche puede ser traicionera.
ResponderEliminarGracias por la lectura y por tu tiempo.
Un abrazo.
La noche con su quietud y su magia suele traer el recuerdo y la ausencia de una manera tan nítida y fragante que nos deja sumidos en el limbo de la nostalgia.
ResponderEliminarSi se vuelca en un poema, como este, bienvenida sea.
Besos
Tan bellos los recuerdos que hacen juego con tus versos.
ResponderEliminarPreciosa poesía como todo lo que escribes.
Siempre es un placer leerte Jero.
Un abrazo.
En efecto,la noche es un arma de doble filo,aunque siempre mágica.
ResponderEliminarGracias por tu visita Verónica.
¿Qué mejor hora para la nostalgia que la noche?
ResponderEliminarGracias Elda.Siempre es un placer verte por mis blogs.
Un abrazo.
Es precioso, lo que has escrito.
ResponderEliminarAy¡ la noche...
Por eso, yo, salgo poco de noche.
Un abrazo,Jerónimo.
Bueno,a mí siempre me gustó salir de noche,más que de día...pero ahora ya menos.
ResponderEliminarGracias Mar.
Un abrazo.
Una noche envuelta en abrazos apasionados donde los latidos se envuelven en lujuria, y la noche se hace pasión.
ResponderEliminarMuy bello poema, amigo.
Muchas gracias por el interesante comentario que dejaste en "Mi pluma de cristal".
Un beso.
Será amarga pero también muy inspiradora.
ResponderEliminarMaravilloso tu poema! Es que la noche se hizo, magica y apasionada para soñar.
ResponderEliminarUn abraXo
Gracias a ti María por visitar mi blog.Me alegra mucho verte por aquí.
ResponderEliminarUn abrazo,amiga.
Cierto Toro,la noche suele tener embrujo.
ResponderEliminarSaludos.
Así es Marilyn,siempre ha tenido su encanto.
ResponderEliminarGracias por tu lectura.