(Con todo mi cariño, a mis padres y tíos -a mi familia- que crecieron a golpe de privaciones y estrecheces en los peores años de aquella España en blanco y negro de la posguerra.)
Antes incluso de aprender a hablar,
ya contaba balcones por las calles
agarrado a tu mano,
presintiendo que había nacido rico
en abrazos, en risas y en cariño.
Supongo que por eso me admiraban
-algunos me envidiaban-
aquellos que paraban a mirarnos
(ellos ya habían perdido sus riquezas).
Yo era el rey de unas vidas rebosantes
de esperanzas posibles
a pesar de los tiempos,
a pesar de las clases sociales, de las castas,
a pesar del origen.
Y era mi boca abierta y desdentada
mostrando su rosada candidez,
la que inyectaba fuerza y entusiasmo
a sus negros destinos.
Ellos reían, sí, pero sus risas
eran solo bengalas en la noche
que apenas aluzaban las orillas
del río que los llevaba.
Mi risa, en cambio, era
como esa fina lluvia del otoño
que empapaba sus almas amustiadas,
ávidas de fecundas sementeras.
Yo fui el rey de sus casas, siempre frías
y alegré con mi cántico de infancia
sus vidas miserables,
sus escasos momentos de asueto y de ternura.
Antes incluso de aprender a hablar,
ya llenaba de risas las mañanas
agarrado a tu mano,
ya sabía que había nacido rico
en caricias, en besos, en amor,
aunque aún no supiera
que todo ese tesoro ya venía
con una fecha de caducidad.
Y esa fue la razón
de que todo pasara, como pasa la tarde
detrás de una ventana.
Ahora sólo recuerdos han quedado
de aquel inmenso mar de sensaciones
que se empieza a secar cuando ponemos
almenas a las torres de la infancia.
Estremecedor poema; me emocionan esos recuerdos que no me son ajenos; que ese tiempo lo llevamos en el alma aquella generación entonces niños alimentados con el cariño familiar para ocultarlos la tragedia que se vivía en las casas.
ResponderEliminarJerónimo, no creo que "ese mar de sensaciones se empiece a secar", en ellas se crece y en ellas conformamos nuestro modo de ser y de estar en el mundo.
Muy emotivos versos, que me han conmocionado por su realismo.
Enhorabuena.
Un abrazo.
Hola Fanny.
EliminarSi no te son ajenos estos recuerdos es porque algo te tocó vivir y entenderás mejor el poema.De hecho lo has explicado muy bien: "...alimentados con el cariño familiar para ocultarles la tragedia que se vivía en las casas" Y así era exactamente.Por eso esa etapa de mi vida yo la recuerdo con mucho cariño a pesar de que más tarde supe cual era la realidad de mi familia.
Con el "mar de sensaciones" que termina por secarse me refiero a la pérdida de esa inocencia infantil donde todo era de color de rosa.Pero por supuesto que esos recuerdos perduran en el alma para el resto de la vida y ayudaron a formarte como persona.
Un abrazo y gracias por tu presencia.
Un precioso poema, los recuerdos de la infancia son los que nos van formando y tú llevas en tu espíritu el candor que ha dejado aquella época. Tu buena esencia se nota en cada verso que nos entregas.
ResponderEliminarCariños….
Me alegra que haya sido de tu agrado Oriana.
EliminarY sí,la infancia es una etapa fundamental para la formación del futuro adulto.
Gracias por venir.
Abrazos.
Precioso poema desde el principio al final. Felicidades.
ResponderEliminarUn abrazo.
Me alegra que te haya gustado este poema de recuerdos, Rafael.
EliminarUn abrazo.
He querido llegar a este balcón tuyo para disfrutar de tu poesía y de la niñez que en este poema has derramado.
ResponderEliminarAplausos. Un abrazo cordial
Pues muchas gracias por tu visita y por esos aplausos, Candela, estás en tu casa.
EliminarAbrazos.
Que bonito recordar, y que orgullo el hacerlo así.
ResponderEliminarMuchos besos
Pues sí, en el fondo somos más pasado que presente o futuro.
EliminarGracias por tu huella, Misterio.
Un abrazo
Una bonita historia con mucha dulzura expresan todos tus versos, donde el amor de la familia se palpa en cada estrofa.
ResponderEliminarLa España en blanco y negro como tu dices, la niñez la veía de colores, por lo menos es lo que me parece recordar, donde no nos hacia falta muchas cosas para ser felices.
Me encantó Jero, son unas letras muy sentimentales.
Abrazos.
Yo creo que la infancia es la etapa más importante de la vida porque según sea ella así vamos a ser y a comportarnos después.Por eso es tan importante el tener una infancia feliz, sin sobresaltos. Y yo la mía, a pesar de los tiempos, la recuerdo así, muy feliz. Como bien dices, no necesitamos mucho para serlo, solo cariño y poco más.
EliminarGracias Elda por tu opinión siempre sincera.
Abrazos.
Tan altas las almenas, tan lejos esa infancia de dicha entre desdichas, tan poblados de risas nacidas de tu risa a pesar de los pesares.
ResponderEliminarY cuánto llena la vasija del recuerdo ese trasiego de comenzar a vivir rodeado de tanto sentimiento del bueno.
Es emotivo hasta la médula; te felicito.
Besos.
Me alegra que lo veas así, Marinel. Gracias.
EliminarUn abrazo.
Este poema me ha emocionado, Jerónimo, y eso se agradece mucho. ¡¡que mayor riqueza que el cariño, el saberse querido, a pesar de esas estrecheces, esas de las cuales tu hablas sobre tu época infantil , de la tuya, de la mía, de la de tantos; creo que muchos de los que lean este poema se sentirán identificados, yo me he sentido identificada. Y ahora observo a mi alrededor y me apenas ver los pasos atrás que esta sociedad parece estar dando, me apena...
ResponderEliminarAbrazos sinceros, aún sin conocerte
Fina
Me alegra oír eso, Fina. No hay mayor satisfacción para el que escribe que comprobar que lo escrito llega al corazón de quien lo lee.Lo cierto es que la literatura es también eso, un hermoso vehículo para llevar emociones de unos corazones a otros.
EliminarY sí, cuando estamos perdiendo derechos y poder adquisitivo es cuando vuelve el fantasma de aquellos años duros que nadie quisiéramos volver a ver.
Abrazos, Fina.
un poema testimonio desde tus propias vivencias
ResponderEliminardesde tu apreciación más sentida
desde tu pulso y signo reposado que el tiempo da
la distancia necesaria para decantar
la memoria social se condiciona facilmente, pero la memoria emocional
esa se queda pulsando para no olvidar
abrazos Jerónimo
mil gracias por cada una de tus hermosas huellas
Muy cierto Elisa, la memoria emocional no se pierde nunca, es como un signo de nuestra propia personalidad.
EliminarGracias a ti por pasarte y dejar tan bellos comentarios.
Abrazos.
Siempre te hablé, Jerónimo, de las altas cotas que alcanzaba tu poesía cuando la derramabas sobre los dulces recuerdos del amor perdido, quizás se me olvidaba que también volaban a gran altura estos poemas en los que manejas con destreza de maestro otro tipo de nostalgia. Lo más hermoso es que nos haces partícipe de ese sueño y nos convence de una manera rotunda de la belleza sin límites de la gente sencilla que lucha y que ha quedado para siempre.
ResponderEliminarUn abrazo.
Me alegra verte por aquí de nuevo Enrique.
EliminarMuchas gracias por tus siempre amables palabras para mis versos.
Hay recuerdos que viajan con nosotros donde quiera que vayamos y hasta el final de los días, es inevitable.
Un fuerte abrazo, amigo.
Jerónimo, tu poema es entrañable y profundo...Hago mío cada verso,donde se baña la vida, se renueva y sueña...Fuímos ricos en cariño, en risas y sueños y llevamos en el alma a aquellos que nos dieron su vida y su tiempo...Ellos permanecen en nuestra piel y en nuestro corazón...y escapan de vez en cuando a borbotones de risas y de sueños alzando almenas, que nos sostienen mirando el pasaje inolvidable de la infancia.
ResponderEliminarMi felicitación por tu calidad humana y literaria, que siempre nos deja huella...y nos impulsa a seguir escribiendo y recreando la vida.
Mi abrazo inmenso y feliz domingo, Jerónimo.
M.Jesús
Muy cierto María Jesús, la infancia debería ser siempre así, una etapa llena de risas y de amor.
EliminarGracias por tus amables palabras.
Otro abrazo para ti, amiga.
Recuerdos grabados en la memoria del alma, recuerdos que perduran en el corazón, preciosos versos, una entrada muy bella en homenaje a la infancia, al tiempo pasado, a tus padres, a tu familia.
ResponderEliminarUn beso.
Gracias María, me alegra saber que te ha gustado.
EliminarAbrazos.
¡Pero qué maravilla de poema!
ResponderEliminarMe ha encantado. Te felicito
Que dulce la infancia nos fue y cuán tan altas las torres y, qué alegría la del recuerdo de aquellos tiempos inocentes y sanos.
Abrazos
Me alegra que haya sido de tu agrado, Trini.
EliminarLa infancia es la base de todo lo que luego seremos en la vida.
Gracias por pasarte.
Abrazos.
Qué hermoso recuerdo desde el niño que queda dentro al adulto que narra su voz. Me ha encantado. Así, los niños,colorean con su presencia, con sus risas y su inocencia, todo el blanco y negro que cualquier época obliga a vestir, y los padres se miran en ellos. Precioso círculo de amor en tu familia.
ResponderEliminarEncantada de haber leído tan hermoso poema, Jero.
Un abrazo.
No hay nada más hermoso que crecer rodeado de cariño.
EliminarGracias María José por tu preciosa huella.
Un abrazo, amiga.
"Y era mi boca abierta y desdentada
ResponderEliminarmostrando su rosada candidez,
la que inyectaba fuerza y entusiasmo
a sus negros destinos."
Qué perfeccion y hondura en tus imágenes poéticas.
Es un gran placer leer tu poesía.
Enhorabuena.
Un abrazo
Muchas gracias Volarela, el placer es mutuo.
EliminarMe alegra saber que te ha gustado este poema de recuerdos.
Un abrazo.
la nostalgia en la hornacina
ResponderEliminarsaludos
Así es Omar, un poema cargado de nostalgia, sin duda.
EliminarGracias por pasarte.
Ufff! Que belleza Jeronimo y que sincronia tengo con tus imagenes sobre la riqueza, sabes que estoy escribiendo mi proximo post y se llama justo asi (por ahora) Mi Riqueza, espero terminarlo hoy.
ResponderEliminarMe encanta ese asomarse a la infancia, no en balde dicen que la infancia es privilegio de la vejez (y conste que no te estoy llamando viejo) tu me entiendes, espero, jajaja
Un abrazote! y te felicito por tan precioso poema, todo una joya!
Te entiendo Natalia, aunque no me falta mucho :)
EliminarTe contesto tarde, por lo que ya leí tu interesante post y me gustó mucho.
Muchas garcias por tus palabras.
Un abrazo.
Precioso, Jerónimo. De una ternura que acaricia los sentidos e invita al recuerdo.
ResponderEliminarQué nunca dejemos de contar balcones y siempre seamos ricos en abrazos y sonrisas.
Besos
Que así sea Narci, hasta el final de nuestros días.
EliminarMe alegra que te haya gustado.
Abrazos.
que bonito ... me ha encantado, besitos
ResponderEliminarfeliz noche
Gracias Cora, me alegro que te haya gustado.
EliminarAbrazos.
Es precioso este recuerdo. Me ha encantado.
ResponderEliminarTe mando un fuerte abrazo.
Gracias Amalia.
EliminarOtro abrazo para ti.
Preciosos versos llenos de emoción, besos
ResponderEliminarGracias Hanna, me alegra que hayan sido de tu agrado.
EliminarUn abrazo.