Ríen los últimos amantes junto a un mar ya tranquilo, en los atardeceres de este final de un verano atípico y extraño. Ríen y afloran en sus risas todos aquellos besos que volaron gozosos de unos labios borrachos de deseo a otros labios heridos por la espera.
Se atemperan las tardes de este septiembre neutro y anodino.Mientras, sus días obreros van torneando una preciosa cuna con maderas de haya, de sauce, de castaño...para el otoño-niño que llegará una tarde cualesquiera entre brillos dorados y entre sábanas tibias.Y un viento renovado anunciará, con ráfagas de lluvia, su feliz nacimiento.
Nos llegará el otoño con un sol amarillo bajo el brazo y una risa de ámbar transparente que hará brotar, cual manantial divino, el mosto azucarado de las cepas.
Se despereza la luz de la mañana sobre los tejadillos repletos de vencejos soñolientos aún. Más allá de las torres sin almenas, se desnuda la sierra de perennes verdores y se pone su camisón de niebla para dormir un sueño que durará seis meses, hasta la primavera.
Es tiempo de nostalgias, de añoranzas de unos días sin horas y sin prisas que, al igual que las aves migratorias, se escaparon huyendo de los fríos. Es tiempo de reposo, de planes y proyectos para el futuro incierto que, como un tren ya cansado y abatido, nos lleva sin remedio,entre enormes volutas de humo negro,hacia el túnel oscuro del invierno.
Los últimos amantes dejan atrás la playa y marchan a sus casas de cálidos salones. Se llevan, guardados bajo llave y en cofres de colores, las risas y los besos del último verano. Es su mayor tesoro.
Qué bonito¡ que bien has descrito el paso del verano al otoño.
ResponderEliminarPalabras muy acertadas.
Bss ( el centro comercial rebosaba agua en el parkin,mi garaje era un río, saqué la canoa y todo)
Tal y como lo explicas querido Jero casi me da pena que se acabe la época estival. Pero también pienso en que los besos no se aletargan en otras estaciones, simplemente cambian de paisaje y yo (que siempre he sido de transiciones) adoro tanto el otoño como la primavera.
ResponderEliminarEl verano no me gusta nada y el invierno es tan solo un pasito a algo mejor.
Ahora si con un amor como el que plasmas se cambiaría la concepción de cualquiera.
Abrazos.
Hermosa descripción del otoño, que por cierto, a mi me gusta, aunque debo decirte que en Las Palmas De Gran Canaria, hace un día espléndido y mi mujer y yo nos vamos a la playa.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hermosa loa a ese hoy que ya es mañana y que guarda la reseña de cuanto bien se asienta en el avanzar cotidiano.
ResponderEliminarUn abrazo
Los últimos amantes...
ResponderEliminarPrecioso y sugerente.
Un abrazo.
encantador trabajo Joaquín
ResponderEliminarel otoño es mi estación FAVORITA
acá la primavera anda como niña consentida y caprichosa
(dan ganas de darle su correctivo jajajaja)
para los amantes (palabra preciosa)
no hay época del año
todas son perfectas para el practicar el amor
aunque los años nos deterioren ...
abrazos y buena semana
gracias por tu huella
con respecto a la sugerencia
la imagen es la cama, como medio hacia
en donde todos los temores y demonios se asoman
por eso el poema es como un conjunto de imágenes independientes
de lo contrario lo habría escrito con un cordón vertebral
abrazos (acá es festividades patrias hasta el domingo)
Perfectamente descritos los escenariosy las situaciones en este relato de tintes nostálgicos que hoy nos dejas, amigo Jerónimo. Consigues involucrar al lector y eso es sumamente importante.
ResponderEliminarUn abrazo de luz
Fina
Bellísimo y poético texto, amigo, en honor del otoño; me ha encantado. Mi aplauso y abrazo pata ti.
ResponderEliminarMaría
El verano tiempo para amar sin medida, nos deja el verano y se acerca el frío otoño, la pasión se apaga en los amantes.
ResponderEliminarUn beso.
Estos días obreros, que van moldeando una preciosa cuna de haya, de sauce y de castaño para el niño otoño, que llegará encendido de brillos dorados y sábanas tibias...Estos días se sienten orgullosos de verse plasmados en letras por un poeta de tu talla, con la maestría y la magia, que pones en las letras...Un placer leerte y disfrutar de la naturaleza abrazada intimamente a la literatura...Mi abrazo grande, Jerónimo.
ResponderEliminarM.Jesús
Me ha encantado esta descripción envolvente y precisa, casi como pinceladas en una pintura en tránsito.
ResponderEliminarbesos
Una maravilla de letras, y que forma tan bonita de describir...
ResponderEliminarUn beso grande.
Ah! que dulce descripción de este verano que terminada, donde me he dejado envolver por esa visión que se aproxima de colores amarillos y anaranjados como las puestas de sol, (en el campo, claro).
ResponderEliminarUn bonito paisaje tus letras Jero, a ti no te hace falta una paleta de colores, los tienes todos en tus preciosas inspiraciones.
Un abrazo.
Preciosa descripción , nostálgico y poético. Besos
ResponderEliminarSu mayor tesoro.
ResponderEliminarEsos últimos besos del verano son recordatorio cálido para los meses que se avecinan.
¿Perduran?...
Saludos
Tesoro magnífico tus letras aquí, Joaquín.
ResponderEliminarUn placer.
Feliz semana, amigo.
Hola Joaquin, mientras te leo voy imaginando y flotando en tus imagenes. Es un regalo siempre leerte, pues logras transportarnos con tu sensibilidad poetica. Un abrazote desde mi otono particular, lleno de lz dorada.
ResponderEliminarQué preciosidad esos últimos amantes y esos últimos días del verano :-)
ResponderEliminarBesos
Bellisimas palabras, para despedir este tiempo estival, que aún sin querer se nos escapa de las manos...
ResponderEliminarUn abrazo
¡Ay, Joaquín!
ResponderEliminarMis respetos, a la hermosa musa que te asiste; encantas con los maravillosos vocablos poéticos. Lo comido y lo bailado nadie nos lo quita.
Feliz fin de semana, un gran abrazo
Gracias a todos por vuestra presencia y por vuestras amables palabras que me animan a seguir escribiendo.
ResponderEliminarAbrazos y feliz semana.
¡Ay, Juaquín!!!
ResponderEliminarMe quedo sin palabras! Es tan bella esta prosa poética! Que la leí dos veces para empaparme de la musicalidad que contiene. Es un rezo armonioso y cantado a este otoño que comienza; y al verano que atrás dejamos con un pizco de nostalgia y, también al invierno que llegará si vivimos mas pronto de lo que pensamos .
Ha sido un inmenso placer pasar a leer esta poesía bella -bella, de ensueño.
Te dejo mi felicitación y estima. Un beso. Y se muy muy feliz.
Gracias Marina por tus deseos y por tu presencia en esta prosa otoñal.
EliminarUn abrazo.
Un texto precioso que me ha gustado mucho.
ResponderEliminarMaravillosa descripción.
Un abrazo.
Leyéndote dan ganas de besar el otoño, de dejar al fin el estío abrasador y mecerse en la caprichosa muda de estación.
ResponderEliminarMuy bonito.
Abrazos.
Amalia,Marinel...gracias por vuestra lectura y vuestras reconfortantes opiniones.
ResponderEliminarAbrazos.