-I-
Es la reina de su casa.
Cada mañana,en su reino,
organiza sus estados
y pasa lista a sus súbditos:
cuatro gatos malcriados,
tres perrillos juguetones
y una cotorra con asma,
que hace tiempo que no habla.
A todos los alimenta
con recortes de carnaza
que recoge en el mercado.
Ya tarde,sale a la calle
con el pelo repeinado,
con la cara relavada
y los labios muy pintados.
Todo el mundo la saluda:
¡Carmencita,buenos días!
¿Dónde vas tan de mañana?
¡Qué guapas vas ,Carmencita!
Y ella,sonriente y coqueta,
disfruta por tanta fama.
Se siente guapa y querida
y a ella,con eso le basta.
En la cuesta del mercado,
Carmencita va cansada.
Y se para en una esquina
y sueña-ojitos en blanco-
con aquel amor de antaño –
¡hace tanto tiempo ya!-.
¡El gran amor de su vida!
Él era fornido y guapo.
Bohemio de noches largas,
amigo de cerrar tascas
y de cantar a la luna
cuando ya estaban cerradas.
Se conocieron en Anclas,
un café decente y limpio
junto al puerto de La
Habana.
Él,moreno y bronceado
de tanto navegar mares.
Ella,menuda y delgada,
con la cintura muy fina
y una carita de niña
inocente y sonrosada.
En los dos meses que estuvo
de permiso por La
Habana ,
se hicieron inseparables.
Cada tarde la llevaba
a ver romperse las olas
contra los acantilados
del otro lado del puerto.
Y,cuando la espuma blanca
se rompía en mil pedazos,
Carmencito,emocionada,
se agarraba a su cintura
y él, ,temblaba…
al sentir su aliento fresco
sobre su boca reseca;
al sentir sus senos tersos
sobre su cuerpo sediento
de perfumes y caricias.
Y la besaba en los labios.
Y ella lo dejaba hacer,
porque estaba enamorada…
Mas,una tarde sombría,
de finales del verano,
se le vino el mundo encima.
Él le dijo que partía.
Que su barco abandonaba
y que no la olvidaría.
Y Carmen le suplicó
que no se fuera.
Que se quedara con ella,
que la Habana
era muy bella
y que ella lo cuidaría…
Y él le dijo,muy bajito:
”Carmen,mi vida,te quiero;
y jamás te olvidaré,
pero yo soy marinero
y si no salgo a la mar,
de tristeza yo me muero.
Ya,muy pronto volveré
a tu lado nuevamente.
Espérame donde el mar
se rompe en espuma blanca
y,una tarde como esta,
cuando menos te lo esperes,
regresaré con mi barco
y ya no me iré jamás…”
Y se fue al amanecer
dejándola junto al muelle
con el alma destrozada.
Y cada tarde acudía
al acantilado,sola,
por ver romperse las olas
en trozos de espuma blanca.
Y así un día y otro día,
y así un año y otro año,
pero él nunca volvía…
(Continuará,lo siento...jejeje)
jajaja... Pues va muy bien, así que vete preparando material para continuar y rematar la faena.
ResponderEliminarUn abrazo y feliz fin de semana.
Pues ya sabes lo que te toca a
ResponderEliminarromancear con Carmencita y luego
nos lo terminas de contar.
¡Ah! y no se te ocurra escabullir
el bulto, que lo que se empieza
se termina.
Un fuerte abrazo y voy a romancear
y también con Carmencita o quien
haya en el camino.
jajajaja, esto es como los pliegos de cordel...
ResponderEliminarA ver si te lo compra un ciego con capa, o el descendiente del Lazarillo, y lo canta por toda Extremadura.
Un abrazo.
No lo sientas, Jerónimo, que aquí seguiremos emocionándonos con tu buena poesía y recibiendo a Carmencita que ya se ha ganado el cariño en nuestros corazones.
ResponderEliminarQué bueno este romance, no tardes en continuar.
Besos
Bueno,es un romance que tenía guardado en el baúl y que por su extensión lo dejaré en dos veces.
ResponderEliminarMe alegro que te haya gustado Rafael.
Ya vendrá el desenlace.
Un abrazo.
Nada Paco,habrá segunda parte,por supuesto.No os voy a dejar con la intriga..
ResponderEliminarYa me pasaré a leer los tuyos.
Un abrazo.
Jajajaja...sí,aunque era niño aún,recuerdo muy bien esos romances en pliegos de colores.Venían los romanceros por los pueblos y los leían a viva voz por las esquinas.Las mujeres,sobre todo,se arremolinaban a escuchar las historias...eran otros tiempos.
ResponderEliminarGracias por la visita Aurora...
Un abrazo.
Así será Verónica,en un par de días o tres como mucho os sigo "torturando" con esta historia lacrimosa y real como la vida misma..jajajaja
ResponderEliminarLo cierto es que siempre me han gustado los romances,aunque parece que estén pasados de moda, y de vez en cuando escribo alguno.
Gracias por tu acogida,eso me anima a seguir con la continuación.
Un abrazo.
que bello cantar este romántico poema
ResponderEliminarme recordó la historia de Penélope (la de Serrat),claro que ella está triste por que el amor se le va por alta mar y la otra por tren
pero al final ambas sufren por ese querer que no las prefiere y las deja en segundo lugar, pues su mayor placer está en navegar o recorrer caminos
vaya destinos de desdicha y de ausencias, así penan las horas con la lágrima suelta esperando el regreso del amado.
Felicitaciones Jerónimo, un romance muy bien llevado en ritmo
abrazos y feliz fin de semana
Jerónimo,me ha encantado el romance.Lo has contado de forma sencilla,entrañable y rítmica...Una gozada disfrutar de tus letras y hacer la historia cercana y real,amigo.
ResponderEliminarMi felicitación y esperamos esa segunda parte...,
Gracias por tu cercanía y tus palabras.
Espero,que los Reyes Magos te dejen en la ventana lo que necesitas y esperas siempre...
Mi abrazo inmenso y mi ánimo,poeta y amigo.
M.Jesús
Gracias Elisa.Sí,hay un cierto parecido aunque no pensé en ello.
ResponderEliminarTe invito a leer el desenlace.
Abrazo.
Muy amable María Jesús.Siempre me gustaron estas historias tipo romance que al parecer han quedado un tanto en el olvido.
ResponderEliminarGracias por tus palabras.
Un abrazo.
Me encantan los romances Jero, tal vez me anime algún día a mostrar uno, por lo pronto tengo un personaje que se llama Alicia que nunca he puesto en ningún sitio y a una italiana llegada a mi país por los años 40 "Angela Rosa" pero creo que son prosa jajajjajaj, vos sabés que no entiendo un pomo de formas. Ahora me voy a disfrutar de la segunda parte de esta cubana ¡y espero termine bien! Besotes amigo.
ResponderEliminarPues siento decepcionarte,Lyli.Parece mentira que aún no me conozcas...¿tú crees que algo que yo escriba puede terminar bien?.Si soy el rey de los pesimistas...jajajaajja
ResponderEliminarY esos personajes tuyos,a sacarlos a la luz,que seguro están esperando con los brazos abiertos.Da igual en verso o en prosa,seguro que lo harás bien.
Abrazo.