jueves, 12 de octubre de 2017

Tu nombre

 

Aquí sigo,

aprendiendo a decir tu nombre sin adornos,

desnudo de ropajes.

Probando a recitar sus mágicos fonemas

sin arreglos de orquesta,

sin bellas melodías.

Intentando hacer simple su grafía

maquillada de gótico tardío.

Lo intento cada día.

Lo desmenuzo en sílabas viajeras

y fabrico con ellas

poemas de distancias y de olvido.

 

Mientras tanto,

aquí sigo.

Es posible que dentro de unos meses,

de unos años tal vez,

pueda volver a pronunciar tu nombre

sin que me duela el alma.


Hasta entonces,

hasta ese aciago día,

las letras de tu nombre,para mí,

serán dulce castigo.

11 comentarios:

  1. Algunas cosas nunca se terminan de aprender que ya debemos comenzar a olvidarlas...

    Saludos!

    J.

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  2. Es un poema precioso Joaquín, dulce, nostálgico y sentido.
    Sé bien lo que cuesta nombrar un amado nombre.

    Besos

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  3. Qué hermoso y dulce poema!!!!

    Bonito volver a leerte.
    Un abrazo.

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  4. José,Carmela,Amalia,gracias por pasaros,me alegra volver a conectar con vosotros después de un par de meses de inactividad y más cuando acabo de darme cuenta que no era este el poema que tocaba,que ya lo publiqué hace más o menos año y medio.Mis disculpas a vosotros y quienes vengan después.¡No es bueno perder el ritmo! :)

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  5. Bueno es ser y estar Joaquín, y estar siendo lo que somos y el afán nos predispone para no cejar en el empeño de sentirnos aliviados cuando cedemos a los demás de nuestro adentro ese bien que conservamos y el aliento en tantas ocasiones en que nos perdemos…
    Un fuerte abrazo

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  6. Un poema tienen diferente impacto cada vez que lo lees. Depende del estado de ánimo del lector. El nombre igual, lo recuerdas con diferente intensidad dependiendo de su momento. A mi me parece un poema genial, digno de repetirlo.
    También yo estoy regresando de un viaje.
    Un abrazo grande Joaquín.

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  7. Tu nombre...

    "lo desmenuzo en sílabas viajeras
    y fabrico con ellas
    poemas de distancias y de olvidos"

    Bellísimo, enhorabuena y cariños.

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  8. La misma palabra, sin adornos, para condenar el olvido de un amor, Un abrazo. Carlos

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