La
tarde trae aromas de flores encendidas
y acuosos sabores de fruta sazonada;
fenece otro verano de cálidos recuerdos
y en el aire,tu amor,impregnándolo todo.
Románticos paseos por la orilla del río,
con barcas de colores decorando la tarde;
turistas en hilera esperando el momento
de amueblar sus retinas con trocitos de arte.
Rumores de oleaje de un mar azul-cobalto
y luces de neón encendiendo la noche;
lejanas melodías que nos regala el viento
y la sonrisa eterna en tus ojos de miel.
Se nos va otro verano,otro retal de vida,
mas nos queda la imagen de los atardeceres
y de las dulces noches coronadas de estrellas
en las que nuestros labios con pasión se fundieron.
y acuosos sabores de fruta sazonada;
fenece otro verano de cálidos recuerdos
y en el aire,tu amor,impregnándolo todo.
Románticos paseos por la orilla del río,
con barcas de colores decorando la tarde;
turistas en hilera esperando el momento
de amueblar sus retinas con trocitos de arte.
Rumores de oleaje de un mar azul-cobalto
y luces de neón encendiendo la noche;
lejanas melodías que nos regala el viento
y la sonrisa eterna en tus ojos de miel.
Se nos va otro verano,otro retal de vida,
mas nos queda la imagen de los atardeceres
y de las dulces noches coronadas de estrellas
en las que nuestros labios con pasión se fundieron.
Agosto-2010
Bueno Jero, te has adelantado un poco con este poema. "Se nos va otro verano", me ha dado un escalofrío de pensar que pudiera ser verdad, ¡con lo que a mi me gusta!, jajaja.
ResponderEliminarEs un placer poder leerte amigo. Me encanta la tercera estrofa, bueno y la primera, en fin lo vuelvo a leer y en realidad me gusta todita entera. ¡Uy que rimadito me ha quedado!, jajaja.
Un abrazo Jero.
Ese verano te debe estar muy agradecido.
ResponderEliminarNo es para menos.
Saludos.
Se me fué mi verano Joaquín, y no sé que me queda, mas que venir a leerte y disfrutar tu poesía. Siempre es un placer pasar por aquí, mis abrazos de siempre.
ResponderEliminarBueno Elda,es un poema de 2010 y por tanto de ese verano.Ya lo publiqué en Mono,como casi todos.Así que tranquila que el verano aún no ha llegado...jejejeje
ResponderEliminarGracias por tu visita.
Un abrazo
Un poco sí,pero más agradecido quedé yo de él.
ResponderEliminarGracias Toro.
Saludos.
Hola Lyliam.
ResponderEliminarNo te preocupes,detrás de un verano,siempre viene otro.
Gracias por tus palabras.
Un abrazo.
Que bonito¡ pero este verano,está a la vuelta de la esquina,yuju¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡
ResponderEliminarBess
Vi que te referías al verano del 2010, sino te habría comentado algo similar a lo de Elda (algo así como: ¡¡¡no me corras tanto, por favor, que necesito del verano, que el verano es mi vida, Jerooooo!!!).
ResponderEliminarAclarado queda que son recuerdos del verano de hace casi dos años y que te dejaron una hermosa huella que nos transmites con una belleza increíble.
Besos, Jero.
Ya mismo está aquí Mar,para disfrutar de sus largos días.
ResponderEliminarUn abrazo.
Sí,es un poema de otro verano.
ResponderEliminarMe alegro que te haya gustado MAR.
Gracias por la visita.
Un fuerte abrazo.
mil gracias querido y admirado poeta por regalarnos la belleza de tus versos vestidos de añoranzas por los bellos atardeceres que nos regala el estío. Muchos besinos y feliz fin de semana con todo mi cariño.
ResponderEliminarLos veranos frente al mar siempre se asocian al amor.
ResponderEliminarCuando se está frente al mar enamorado todo es una delicia.
Gracias por acompañarme también en Poetas.
Un abrazo
Gracias a ti Ozna.El verano es una estación fantástica.
ResponderEliminarUn abrazo.
Cierto Verónica.El mar ayuda a enamorarse.
ResponderEliminarEs un placer seguir tus escritos.
Un abrazo.
Y el verano vuelve a llegar y nos vuelve a regalar la luz del sol y del calor, y esos paseos a la orilla del mar, y esa tarde con aroma a flores y a vida.
ResponderEliminarUn beso.
Sí,habrá más veranos.
ResponderEliminarGracias por tu lectura María.
Un abrazo.
Nostálgico como el final del verano que narras, y en la línea, Jerónimo que siempre me gustó más de ti. Son esos versos que nos sumergen en una melancolía que embriaga y lo hacen porque tú crees en ella, porque basta echar un vistazo a tus poemas para que nos demos cuenta de que no escribes por escribir. Me agrada, Jerónimo, que me lleves a tu mundo con tus versos, es cierto que los que más me impresionaron fueron aquellos en los que hablas de amores que te hirieron, pero también pude disfrutar de los cuadros costumbristas, de aquellos paisajes que te son tan queridos, y esta entrañable celebración del paso del tiempo.
ResponderEliminarUn abrazo.